Creo que todos vivimos en nuestra vida momentos o situaciones difíciles, algunas de ellas llegan a estar fuera de nuestro control, otras no, son momentos donde te das cuenta que tienes que hacer algo diferente, tomar una decisión de seguir igual o dar esos pasos que te lleven a algo completamente distinto. Ese momento de inflexión fue el que experimente en mi vida hace un tiempo atrás después de un diagnóstico poco alentador. Fue en ese momento que tome la decisión de cambiar y encontrar ese camino hacia la salud integral. Siempre me intereso el tema del cuidado personal, y de ser saludables y sin querer yo misma había llegado a un momento donde el estrés y el descuido, siendo muy honesta con ustedes, me condujeron a sentirme completamente agotada tanto emocional como fisicamente. A veces la vida es como ese río impetuoso, que arrasa con todas sus fuerzas, y sin querer su corriente te lleva en un abrir y cerrar de ojos a un lugar donde ni siquiera imaginabas estar y cuando te das cuenta no solo te encontraste en un lugar desconocido, sino que te al mismo tiempo sentís que te ahoga y no podes ni siquiera hacer pie, para pararte firme.
Fue en un viaje ,estando en el aeropuerto que comencé a sentir una presión y dolor en el pecho que me preocupo demasiado, subí al avión, trate de encontrar calma y relajarme, gracias a Dios llegue a casa y al siguiente día, lo primero que hice fui ir a visitar al médico, el cual me confirmo que mi corazón había sufrido las consecuencias de un estado de salud que necesitaba hacer cambios drásticos urgente. El diagnóstico: presión arterial descontrolada, niveles de colesterol alto, pre-diabetes, inflamación, dolor generalizado en todo el cuerpo, sobrepeso de más de 40 libras. Si me preguntan como me sentía, lo único que quería era estar acostada, estaba triste, desanimada y completamente agotada resultado de un cansancio extremo.
A partir de ese día, puedo decir que comencé un camino, donde no hay regreso, un camino de sanidad y de crecimiento, aprendi sobre salud y nutrición, como establecer hábitos que nos llevan a un estado de bienestar completo. Personalmente logre bajar casi 30 libras, los niveles de colesterol y de azúcar se normalizaron, la grasa en mi hígado se redujo y cesaron las taquicardias. Agradezco tanto a Dios por todo lo que hizo en mi en este proceso que posteriormente me llevó a tomar la decisión de prepararme como asesora de nutrición y salud. Lo que comenzó en una búsqueda personal de salud en mi vida, se transformó al mismo tiempo en un deseo de ayudar a otros a encontrar ese estado de bienestar completo. Si necesitas conversar, escríbeme.